En Aula Joven queremos abarcar, con nuestras actividades extraescolares y complementarias, todos los ámbitos de la formación integral de los alumnos.
Nuestras clases van dirigidas a alumnos en el período de su vida en el que más aprenden y desarrollan sus capacidades. Durante la infancia el niño es más receptivo a todo tipo de información y su imaginación no está todavía condicionada por el entorno que le rodea.
En Aula Joven consideramos al niño como un todo: son tan importantes la afectividad y la emotividad como el desarrollo de la inteligencia y de la capacidad física. En cualquier actividad los alumnos están ejercitando todos estos elementos que le constituyen como individuo. No perdemos esto de vista, por lo que procuramos que siempre se interrelacionen los conocimientos que el niño ya ha incorporado: el niño aplica e incorpora conocimientos matemáticos cuando, por ejemplo, toma una clase de expresión plástica o de deportes, y de lengua cuando modela en plastilina o arcilla y aplica la metáfora para designar lo que ha creado.
Asimismo, nuestra experiencia nos ha demostrado que cualquier alumno aprenderá mejor si se divierte. Si el niño se aburre, no conseguiremos que avance en la materia que esté tomando, sea ésta de orden intelectual, creativo o físico. Por lo tanto, prestamos especial atención en la selección de los profesores que imparten las clases y, en el desarrollo de la programación, al hecho de que los alumnos que las toman han estado durante horas en clase en horario lectivo, que suelen estar cansados, y que necesitan, sobre todo, jugar como niños que son.
Sabemos que la mejor manera de para el niño es la interacción con sus iguales. Por lo tanto, procuramos que en el grupo se desarrollen las actitudes de respeto mutuo mediante el debate y el intercambio libre de opinión, siempre moderados por el monitor, quien dirige la actividad e impone las normas lógicas de conducta.
Lo más importante para nosotros son los alumnos y su formación como individuos en todos los sentidos.